La planta tiene como principal atractivo su follaje: las hojas al emerger son completas, al madurar tienen grandes agujeros que en sus hábitats naturales las hacen resistentes a vientos, que las atraviesan sin quebrarlas.
Es de crecimiento lento, sólo algunas hojas nuevas al año y puede alcanzar los dos metros, siempre trepando a algún soporte adecuado, de lo contrario se extenderá como rastrera.
Ubicación
Debe cultivarse a sombra o semisombra, no tolera la luz solar directa durante las horas más calurosas del día. En interiores debe cultivarse en sitios cálidos, húmedos y luminosos, no resiste fríos ni heladas, necesita reparos en patios con inviernos fríos.
Riego
Es una planta rústica que una vez adaptada a su entorno requiere bajo mantenimiento y no es exigente en cuanto a riego, aunque la condición es no excederse ni encharcar la maceta. Esto último puede producir que las hojas se tornen amarillas o marrones.
Como buena planta tropical, prefiere humedad elevada y poca agua pero frecuente, especialmente en los meses de más calor. Si vives en un clima seco, te recomiendo que rocíes sus hojas a diario.